En 2020, cumplimos 150 años. Un hito histórico para la gran mayoría de empresas y queremos seguir por lo menos otros 150 años jugando juntos.
No en vano, los juegos de cartas nos acompañan durante toda nuestra vida.
Cuando somos peques nos ayudan a mejorar las cualidades psicomotrices, incrementar la sociabilidad, el control numérico y la capacidad de asimilar éxitos y fracasos.
En la adolescencia y en la universidad, nos ayudan a relacionarnos y consiguen entretenernos durante horas de la forma más económica en la cafetería de las universidades con un buen bocata de tortilla. En la mediana edad, nos proporcionan increíbles tardes con las amistades y familiares, en torno a una sobremesa después de la comida o la cena.
En la vejez, se convierten en el mejor compañero para llenar satisfactoriamente las múltiples horas de ocio, manteniendo la cabeza activa, lúcida y estimulando la actividad cerebral y la memoria.
En una sociedad tendente a la individualización, en la que las relaciones humanas se ciñen a círculos cada vez más reducidos, los juegos de naipes simbolizan la diversión grupal y el placer. Como pasar las navidades en familia o entre amigos.
Feliz Navidad y Feliz Año Nuevo!